El líder del Partido Acción Nacional (PAN), Ricardo Anaya, advirtió que el Partido Revolucionario Institucional (PRI) no puede ofrecer un cambio ni hablar de honestidad en Tamaulipas, cuando los gobiernos a su cargo han entregado al estado al crimen organizado.

Tras aseverar que no se han podido comprobar las acusaciones por presuntos vínculos con la delincuencia organizada, lanzadas contra el candidato de su partido, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, Anaya Cortés aseguró que los únicos responsables de la crisis de inseguridad y violencia en Tamaulipas es completa responsabilidad del PRI, que siempre ha gobernado dicha entidad.

Esto, en el marco del anuncio de la dirigencia tricolor, sobre la expulsión de tres de sus candidatos a presidentes municipales en Tamaulipas, quienes fueron “amenazados o comprados” por el narcotráfico. Se trata de los aspirantes al municipio de Hidalgo, Reyes Zúñiga Vázquez; al municipio de Villagrán, Gustavo Estrella Cabrera; y al municipio de Mainero, Luis Cesáreo Aldape Lerma.

El dirigente panista aseveró que Tamaulipas ha sufrido 90 años de “malos gobiernos” del Revolucionario Institucional y aseguró que el abanderado albiazul venció “de manera contundente” en el debate realizado el pasado miércoles, motivo por el cual se desató una “guerra de descalificaciones” en su contra.

“Francisco Javier García Cabeza de Vaca no tiene ni una sola averiguación en su contra y así lo ha acreditado la propia Procuraduría General de la República”, y dado que aventaja en las encuestas, es blanco de ataques personales y desesperados por parte del PRI, acusó.

Aprovechó para recordar que dos ex gobernadores priístas, Tomás Yarrington y Eugenio Hernández, actualmente se encuentran en calidad de prófugos de la justicia, y son buscados por sus nexos con grupos del crimen organizado.

“Los únicos responsables de la crisis de inseguridad que padece Tamaulipas son los priistas; ellos han gobernado siempre en el estado. Las familias tamaulipecas han sido lastimadas en lo más preciado: en su tranquilidad, su patrimonio y en su vida, por conductas reprobables de sus gobernantes, todos ellos emanados del PRI”, recalcó.

A ello se suma que el abanderado priísta, Baltazar Hinojosa, ocupó el cargo de secretario de Desarrollo Social y de Educación en el gobierno de Tomás Yarrington, lo que lleva a pensar que no hay un cambio en el estado con respecto a las relaciones de los tricolores con el narcotráfico.

“No pueden ofrecer un cambio ni mucho menos hablar de honestidad aquellos que han sido parte de las administraciones que entregaron al estado al crimen organizado”, subrayó.